Conoce los 90 segundos de oro
Cuántas veces has pensado… ¿Por qué me resulta tan fácil hablar con esta persona? ¿Por qué no siempre puede ser así?
Yo también solía hacerme estas preguntas y ahora lo veo muy claro. Después de más de 4 años de terapia con mi hijo autista y trabajar conscientemente con las herramientas de comunicación, he comprendido las razones físicas y mentales por las que las personas se conectan. Pensé que siendo periodista sabía cómo manejar la comunicación, pero en realidad solo lo hacía desde una perspectiva profesional mediática. Hasta que trabajé desde el origen, desde lo más simple, desde la raíz; no entendí el valor de lo que los neurotípicos hacemos inconscientemente y que cuando trabajamos sabiendo las razones y beneficios todo cambia.
Estamos rodeados constantemente por personas. Antes de decir una palabra somos solo otra persona en medio del gentío. Cuando comenzamos el saludo nos convertimos en alguien especial; una persona única, con sus peculiaridades, conocimientos y aprendizajes. Un simple «¡Hola!», una mirada cálida y una sonrisa de medio “lao” puede ser inolvidable para quien está frente a ti.
Cuando inicias esa interacción social con otra persona, los primeros 90 segundos son cruciales. Estos momentos iniciales determinan si lograrás establecer una conexión o si tendrás dificultades para encajar con la persona que tiene delante.
Es durante este breve espacio de tiempo cuando debes causar una impresión duradera y crear una sensación de comodidad y familiaridad.
Dividamos esos 90 segundos en 3 partes: El saludo (30 segundos), el mensaje (30 segundos) y el comienzo de tu presentación o cierre (finales 30 segundos). Y en esa división voy a basar los próximos 3 módulos de Empresas Autistas
Para los primeros 30 segundos, el saludo perfecto, vas a conocer el método CARLOTA. Elementos como el contacto visual y la mirada, la actitud, la sonrisa, la presentación personal, la reverencia y, por supuesto, la compenetración desempeñan un papel fundamental en el resultado de los encuentros sociales. Si dominas el arte de saludar de forma auténtica y sincera, podrás forjar conexiones más profundas y dejar una huella duradera en las personas que conozcas.
Una vez que has conseguido compenetrarte con la otra persona o la audiencia que tienes delante, tienes los siguientes 30 segundos para conseguir llegar con tu mensaje y aquí entra en juego el storytelling y el elevator pitch.
El arte de contar historias o storytelling es la técnica que consiste en contar historias de forma seductora para que la otra persona se interese por lo que está diciendo. Por otra parte, el elevator pitch es un discurso breve y directo en el cual tienes que venderte a ti mismo, tu producto o servicio en menos de 30 segundos.
La plasticidad de nuestro mensaje es una herramienta poderosa que exploro en detalle en Empresas Autistas.
Descubre cómo trabajar tu mensaje de forma plástica, utilizando imágenes que se graban en la mente con un 80% de efectividad, frente a solo el 10% de retención de las palabras.
Y acabamos con los últimos 30 segundos.
Comienza a presentar tu idea o incluso a cerrar una acción para más adelante. Para ganar seguridad y consciencia, te enseñaré el método SERGIO con el que vas a conocer cómo gestionar tu cuerpo, tu voz, tus silencios, tu estructura y además vas a conocer a la persona de enfrente para adecuar tu mensaje lo máximo posible.
Al aplicar el Método Sergio, no solo mejorarás tu comunicación, sino que también contribuirás a hacer de este mundo un lugar más seguro y acogedor para las personas especiales, más creativas y sensibles.
Juntos, podemos reducir el acoso escolar y crear un entorno donde cada mente brillante pueda florecer.